Se trata del robot de 9 metros, obra del artista argentino Pablo Curutchet, instalado a propóstio del Primer Festival Hecho en Casa. Su cuerpo de cartón ha servido de pizarra para declaraciones de amor y llamados de atención al Presidente. Sólo falta que alguien lleve una escalera y le pinte una sonrisa, porque hasta ahora no tiene ni cara ni nombre.
noviembre 22, 2012
Santiago Intervenido II: El robot
Está subiéndose por el puente Pío Nono. Con las piernas colgando en el río Mapocho y los brazos tocando la calle. De seguro ha sido la fotografía imperdible de esta última semana.
Se trata del robot de 9 metros, obra del artista argentino Pablo Curutchet, instalado a propóstio del Primer Festival Hecho en Casa. Su cuerpo de cartón ha servido de pizarra para declaraciones de amor y llamados de atención al Presidente. Sólo falta que alguien lleve una escalera y le pinte una sonrisa, porque hasta ahora no tiene ni cara ni nombre.
Se trata del robot de 9 metros, obra del artista argentino Pablo Curutchet, instalado a propóstio del Primer Festival Hecho en Casa. Su cuerpo de cartón ha servido de pizarra para declaraciones de amor y llamados de atención al Presidente. Sólo falta que alguien lleve una escalera y le pinte una sonrisa, porque hasta ahora no tiene ni cara ni nombre.
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fome..copia penca de argentina
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